16 de abril de 2009

La Sonrisa de Dios


Me detuve a pensar que título darle a este post, "Vale la Pena", "El mejor Regalo", "Tu mayor Esfuerzo", en fin, pero me quede con este con el cual titulo el presente escrito. hoy en la mañana mientras el bb dormia (mi sobrino) me sente a meditar un rato en la Palabra y hoy me encontre con una verdad que me sorprendió quizá no por ser una palabra que no haya escuchado o leido antes, sino por ser una verdad que en ese momento dio vida a mis huesos, alma y corazón fue como un alimento luego de estar totalmente vacía, es como cuando tienes mucha hambre y descubres sobre tu mesa tu plato favorito, algo similar fue lo que senti al leer este pasaje y aún más una satisfación y confianza mayor.


Se imaginan ustedes la felicidad de Dios, pues yo nunca habia meditado en eso y hoy al leer Proverbios 23 que detalla una serie de importantes consejos para la vida de un joven, me asombre al leer esto:

Prov. 23:15-16 Cuando alcances la sabiduría, hijo mío, no habrá nadie más feliz que yo; sentiré una profunda alegría al oírte hablar como es debido.


Me detuve un buen tiempo en estas palabras "no habrá nadie más feliz que yo", esto me hizo recordar mi niñez cuando buscaba arrancar una sonrisa a papá con una buena nota o a la maestra con un buen comportamiento, sentía que valía la pena esforzarme por ser mejor porque aquellas personas que más quería podrían sonreir con eso y regalarme un poco de su felicidad, que quizá en este mundo mucha de aquella felicidad sea ficticia.

Pero te imaginas como hijo de Dios lograr hacer feliz aquel Padre Eterno y saber que esa felicidad no es pasajera, momentanea ni ficticia sino real y verdadera. woo que tremendo es esto, quiza me tomen como exagerada pero no importa realmente para mi esta palabra si que fue de aliento de ánimo de fuerzas esta palabra fue y es real.

Pero ahora te preguntaras como logro eso y te dire no es fácil pero se requiere esfuerzo y es una de las grandes cosas que se detallan versiculos antes y después como:

Prov. 23:
12 Aplica tu mente y tus oídos a la instrucción y a los conocimientos.
17No tengas envidia de los pecadores; antes bien, honra siempre al Señor;
19 Atiende bien, hijo mío, y aprende; procura seguir el buen camino.
24 El padre del hijo bueno y sabio tiene razón para estar feliz y orgulloso;
25 ¡haz, pues, que tu padre y tu madre se sientan felices y orgullosos!
26 Pon toda tu atención en mí, hijo mío, y mira con buenos ojos mi ejemplo;

Entonces que esperas te imaginas compartir esa felicidad, saber que Dios puede alegrarse por ver como llevas tu caminar en Él, tal vez no lo veas con tus ojos físicamente pero el puede hablarte con su Palabra y decirte lo feliz que puede sentirse. Vamos a alegrarnos juntos, dispongamos nuestro corazon a vivir como el desea que vivamos, esto requerira un esfuerzo de tu parte, al igual que querer sacarte un 20 en matemática o ingresar a la universidad, sacar el primer puesto etc etc, y por aquel que dio todo por nosotros acaso no estaríamos dispuestos a dar nuestro mayor esfuerzo? y saber de antemano que al final la recompenza será grande. un abrazo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

El ultimo texto es un llamado tremendo, como seguidores de Cristo individuales y como comunidad cristiana.

Muchos saludos Patty :)

Patricia Fiorella dijo...

Asi es mi querida Brisa es un llamado tremendo primero en lo individual, weno amiga se que te referias al texto de hebreos 12 del post titulado las metas de la 261, sabes bajo esta plantilla los comentarios son en la parte de arriba de cada post. jejeje saludos y un fuerte abrazoooo